Una empresa, incluidas aquellas que se desarrollan en el ámbito educativo, sabe que requiere diferentes elementos, humanos y materiales, para poder operar del mejor modo posible. Sin embargo, conocer esto no implica dar con la solución de forma inmediata.
Si nos enfocamos a los elementos materiales, que es lo que nos apremia en este artículo, encontraremos el factor tecnológico que, con el paso de los años y los avances de la ciencia, se ha vuelto cada vez más relevante para el ámbito laboral.
Hablamos de los equipos de cómputo que, si se les pierde la pista, pueden convertirse en una fuente de problemas, en vez de ser una herramienta que contribuya a la operación del negocio.
Por ello, detallaremos diferentes aspectos sobre el tema, pues los equipos de tu empresa podrían provocar la aparición de usuarios insatisfechos, lo que da pie a una avalancha de complicaciones que podrían ser erradicadas sin problemas si se detecta a tiempo.
Para comenzar, hay que tener presente que en la era en la que nos encontramos, pensar en equipos, dispositivos, aplicaciones, programas y, en general, en Tecnologías de la Información, es indispensable.
Las herramientas de este tipo, bien implementadas, siempre pueden sumar a la empresa y ayudar a adoptar prácticas más eficientes y seguras. Además, el trabajador que cuente con los elementos necesarios para su labor, puede entregar la mejor versión de sí mismo dentro de una empresa.
No obstante, también es cierto que muchas veces nos dejamos llevar por lo “más novedoso”, tecnológicamente hablando, o lo que “más se ajusta al presupuesto”, sin considerar nada más.
¿Y por qué no pensar en aquello que “ofrezca la solución a las necesidades de la empresa”? Es decir, poder contar con los equipos que potencien mi negocio. Esto último implica considerar, desde el inicio, el margen presupuestal que se pueda permitir la compañía.
Partiendo de la idea anterior, el primer paso para evitar ser un generador de usuarios insatisfechos, es tener en mente que los equipos deben ser lo más adecuados para la empresa y sus funciones, principalmente.
Las ventajas que puedan aportarse después de eso, son otros beneficios que podremos celebrar y que también podemos considerar, pero hay que partir de lo básico.
Ahora, esto no significa que no necesitemos tecnología de punta o que no podamos aspirar a ella, sino que debemos apuntar a la vanguardia en tecnología, sí, pero desde el nicho adecuado o aquel que dará solución, potenciará la operación y facilitará el panorama para los usuarios.
Por ejemplo, si requieres un auto para hacer viajes dentro de la ciudad, lo normal es pensar en vehículos que para esa labor sean más productivos, como los modelos llamados “de flotilla”, y no buscar vehículos más caros, con una velocidad y funciones que no se utilizarán jamás.
Lo siguiente es analizar cómo, para qué y cuándo se emplean los equipos de acuerdo al tipo de trabajo, pues esto determinará en gran medida cuáles serán las primeras opciones que debes considerar.
El caso más simple para determinar esto es si el trabajo es en oficina, de forma remota o, incluso, híbrido. Con esta información ya es posible establecer algunos detalles sobre el mejor equipo para los usuarios, como una laptop.
Otra idea es cuando se requiere que los equipos únicamente sean capaces de operar algunos programas remotos o quizá navegadores web. En este caso, existen alternativas para poder tener un servidor, donde se desarrolle todo lo informático, y de este modo los equipos operen como acceso para sus usuarios.
Llegados a este punto, debemos destacar cuatro características que debes considerar y que seguramente son causa de insatisfacción o no, en los usuarios de tus equipos:
El punto positivo es que siempre puedes estar a tiempo de cambiar el rumbo de tu organización, con un poco de ayuda.
En Compucentro, gracias a más de 30 años de experiencia y a nuestros asesores expertos, podemos orientarte para que tu compañía pueda contar con los equipos que den solución a las necesidades de todos, incluidos los usuarios.
Nuestras soluciones de cómputo pueden eficientar la operación de cualquier empresa, sin importar su giro, incluso en el ámbito educativo, en el que tenemos opciones específicas. Acércate a nosotros, encuentra lo que necesitas, cotiza en nuestras diferentes modalidades y fortalece tu empresa.